Voley: lesiones y tratamiento
Las tecnopatías son aquellas molestias o dolores asociados a la práctica de un deporte. Algunas de las lesiones en el voleibol más frecuentes son:
- Rigidez, tensión excesiva o dolor cervical (cervicalgia).
- Rigidez o dolor de hombro.
- Rigidez, tensión excesiva o dolor en la zona torácica (dorsalgia).
- Rigidez, tensión excesiva o dolor lumbar (lumbalgia).
- Tensión excesiva en la zona de aductores, siendo diagnosticada finalmente como pubalgia.
- Tensión excesiva en la musculatura lateral de la cadera.
- Microrotura o rotura de isquiotibiales o bíceps femoral.
- Tendinitis rotuliana
- Degeneración cartilaginosa o condromalacia rotuliana.
- Esguince de tobillo.
En OPTIMMUS somos expertos en el diseño de ejercicios de recuperación para cada lesión en el voleibol que te ayude superar las molestias y dolores. Creemos que ejecutar correctamente cada movimiento durante el partido es tan importante para evitar lesiones como la correcta realización de los ejercicios terapéuticos, así que te ofrecemos las herramientas para controlar cada movimiento.


Afectaciones silenciosas: jugar al vóley sin lesiones
Existen afectaciones silenciosas en el voleibol, que no dan sintomatología y lastran tu práctica. No detectarlas puede generar molestias, dolor y lesiones. La preparación física en el voley reducirá las posibilidades de caer lesionados.
Afectaciones silenciosas más comunes en el jugador de voleibol diestro (será opuesto para el zurdo):
- Hombro derecho bloqueado hacia la retroversión y basculación externa.
- Hombro izquierdo bloqueado hacia la anteversión y basculación interna.
- Columna bloqueada en rotación derecha.
- Cadera derecha bloqueada hacia la rotación interna y abducción.
- Cadera izquierda bloqueada hacia la rotación externa y aducción.
- Rodilla derecha con afectación lateral.
- Rodilla izquierda con afectación medial.
- Pie derecho bloqueado en supinación y flexión plantar.
- Pie izquierdo bloqueado en pronación y flexión dorsal.
Activa tus músculos y reduce el riego de lesiones
El cuerpo debe responder cuando lo necesitas. La rigidez articular o las molestias musculares jugando al voleibol no tienen por qué ser consecuencia de la edad, de enfermedades pasadas, anteriores lesiones u otros factores que se dan como causa habitual del empeoramiento de las condiciones físicas. En OPTIMMUS te invitamos a descubrir como con la Activación Muscular mejorarás tu rendimiento. Nos ocuparemos de estudiar y analizar tu función muscular para ofrecer a tu cuerpo los estímulos necesarios para que rinda al máximo.
También te enseñaremos a realizar correctamente ejercicios de recuperación que te permitirán recomponerte antes y después de cada partido de voley y reducirán el riesgo a lesionarte. Solicita una primera consulta gratuita.
