Josep Vide

“Mis problemas musculares y dolencias empezaron antes de cumplir los treinta, con seguridad causados por la vida sedentaria, la falta de práctica deportiva regular, el exceso de peso y demasiadas horas en el trabajo.
Desde entonces, he practicado deporte a rachas, a parte de mi adicción al golf, y he probado diferentes técnicas para tratar mis diferentes y recurrentes problemas musculares (espalda, cuello, lumbares,…) desde la primera lesión seria que me tubo con collarín una semana (justo cumplidos los treinta), y que me trataron los servicios de fisioterapia de mi seguro médico (corrientes, frío –calor, …), relajantes musculares y antiinflamatorios (que me llegaron a producir una gastritis de caballo) fisioterapia, osteopatía, estiramientos, …, y siendo verdad que mejoraban mi situación temporalmente, y eliminaban los dolores puntualmente, no mejoraban mi problema de fondo.
Empecé a tratar me con la técnica de activación muscular con Daniel, hace poco más de tres años, ya pasados los cuarenta, al principio con bastante escepticismo después de tantas cosas probadas, y además de las sorprendentes sensaciones de las propias activaciones, tengo que decir que mi situación física desde entonces no ha hecho más que mejorar, me encuentro mucho mejor que cuando tenía menos de treinta. Después de hacer dieciocho hoyos caminando y tirando del carro, no siento ningún tipo de molestia, como si no hubiera pasado nada, antes acababa con ganas de ponerme bolsas de hielo en las rodillas y tobillos (y le pego a la bola más lejos que nunca).
Ya tengo 43 años. Mi espalda ha dejado, después de más de diez años, de ser una cosa que se quedaba rígida cada poco tiempo, he empezado a salir en bicicleta de montaña dos o tres veces por semana y mi cuerpo lo aguanta sin enviarme señales de dolor, peso unos 10 kg más que cuando tenía 30 años (en eso Daniel aún no ha encontrado la tecla…) pero los llevo mejor que nunca.”
Si como Josep notas que los dolores musculares no te dejan vivir una vida plena y quieres recuperar la vitalidad que en otro momento te permitía afrontarlo todo con más confianza, no dudes en contactar con nosotros.
Juntos, analizaremos tu caso y valoraremos opciones para que recuperes el placer de jugar y vuelvas a ilusionarte pensando en los verdes campos de golf y el golpeo de la bola.
Si quieres saber más sobre lesiones que pueden tener los golfistas y dolencias relacionadas puedes consultar nuestras secciones: